Siempre os hablo de mi niñez y es que nunca había una merienda o desayuno en familia o rodeados de amigos que no hubiera un dulce comprado o hecho en casa.
Este es uno de los dulces que comprábamos en la pastelería para una de estas ocasiones.
Aquí os dejo una receta, bien sencilla, se puede sofisticar mucho más, añadiendo frutas o chocolate, incluso merengue, pero como os digo es apta para cualquiera de vosotros que entráis en el blog en busca de un postre para sorprender a los comensales que visitan vuestra casa.
Ingredientes
Un paquete de hojaldre congelado rectangular.
Cortar las tiras de unos 10 cm de ancho y hornear segun instrucciones.
Para la crema
4 huevos
1/2 litro de leche
40 gr de harina
75 gr azúcar
Pon a hervir la leche en una cazuela, reservando un poco de fria, en un bol, mezcla la harina, el azúcar, la leche fría y poco a poco los huevos, batir bien, añade un poco de leche caliente y sigue batiendo, vierte el contenido del bol en la cazuela, sin dejar de mover y a fuego lento, hasta que la crema espese y dejar enfriar.
Monta las mil hojas: pon una de la tiras de hojaldre sobre una bandeja, cubrela de crema y vuelve a poner otra tira de hojaldre cubrir nuevamente con crema, espolvorea con azúcar y quema con un quemador.
Ummm, que postres más apetecibles.
ResponderEliminarun beso
Que niñez tan dulce ... ;)
ResponderEliminarmmm qué rico! tiene muy buena pinta, lo probaré!!
ResponderEliminarsaludos,
Rachel
thesweetday.blogspot.com
Creo que el comentario anterior lo he hecho mal!!!
ResponderEliminarDecia que los milhojas me recuerdan mi infancia. Me has dado una muy buena idea. Se ven tan ricos.
Besos
Deliciosas! Te han quedado riquísimas!!
ResponderEliminarUn besito!
Me encantan las milhojas, es mi pastelillo preferido, junto con el de manzana. Me quedo de seguidora, un besillo:
ResponderEliminarAlba (de gozoa eta gazia)